Seguramente a estas alturas te estas dando cuenta que en la mayoría de casas nuevas a las que vas tienen fregaderos rústicos, y es que las modas siempre vuelven.
Los fregaderos rústicos, o Belfast, cada vez son más frecuentes por su versatilidad y gran tamaño, que los hacen ganar en capacidad, haciéndolo útil a la hora de tener que usarlo, ya sea para fregar o lavar verduras.
Las piezas están esmaltadas por todos los lados, con lo cual te permite encajarlas incluso en las cocinas más pequeñas que imagines, colocándoos de forma perpendicular en la encimera.
Y la estética clásica que estos tienen le da un toque más que especial a tu cocina, por eso es tendencia.
¿Cómo combino los fregaderos de cerámica rústicos?
La principal razón de su popularidad es esta, la forma de combinarlos.
Se adapta perfectamente a cualquier cocina, tenga el estilo decorativo que tenga, y esto no suele suceder con todos los fregaderos del mercado.
Pero obviamente, siempre tendrá un sitio especial en una cocina de decoración rústica.
En el mercado podrás encontrar alternativas al fregadero cerámica rustico, y hacerlo especial con solo cambiar el material, como acero, corian, silestone o incluso hormigón por ejemplo.
Aunque en cerámica es una de las opciones más decorativas ya sea para cocinas desde minimalistas hasta industriales.
¿Y si me decido por los fregaderos de piedra rústicos?
Estos son menos conocidos, porque la moda del fregadero de piedra solo acaba de empezar.
Son cómodos, bonitos, relativamente económicos y ademas muy muy fácil de instalar y usar.
Estos fregaderos rústicos de cocina, tiene como material la piedra, cuyas propiedades son naturales.
Los más conocidos para fregaderos piedra son el gres porcelánico, la piedra acrílica o el famosisimo aglomerado.
Aunque también es fácil ver fregaderos de mármol natural, de granito o de otros tipos de piedra natural impermeable, que son un poco más caros e igual de eficaz de los anteriores.
La gran ventaja de estos fregaderos de piedra es la humedad, en nuestra cocina seguramente la humedad no falta, por eso es importante elegir materiales que duren mucho, fáciles de limpiar y resistentes al agua.
Además, permiten una gran cantidad de diseños y colores, por lo que podrás adaptarla al máximo a tu estilo de cocina.